La consecuencia de perder el tiempo.

Apenas este fin de semana se celebró el Congreso Nacional de Jóvenes de la Iglesia Cristiana a la que asisto. Lamentablemente no pude asistir. Aún recuerdo en mis años mozos cuando asistía a los Congresos y Campamentos. No sólo eran divertidísimos, sino además, aprendías sobre el camino de Jesús mediante dinámicas y juegos. Cantábamos hasta […]

Leer más La consecuencia de perder el tiempo.

Dime con quién andas…

A todos nos gusta tener amigos, pero a no todos nos gusta tener BUENOS amigos. Seguro ya estarán diciendo ¿qué le pasa? ¿cómo que nadie quiere tener una buena amistad? Me gustaría explicarme. Generalmente, en la vida coincidimos con muchas personas pero no con todas encontramos esa afinidad que nos acerca, que trasciende y se […]

Leer más Dime con quién andas…

La búsqueda

Con tanta información a nuestra disposición e internet como una fuente de conocimiento actualizada «en tiempo real» podemos encontrar lo que es nos ocurra. Tan sólo con entrar a google y empezar a escribir algo (que además suele completar el mismo buscador) tenemos una respuesta. Algunas veces cuesta más trabajo que otras, dependiendo de la […]

Leer más La búsqueda

Un Chat con Dios

http://www.youtube.com/watch?v=oPBlXZWWqy8

En estos tiempos en los que la tecnología hace todo por nosotros, nos aferramos a comunicarnos a distancia. En algunas situaciones resulta positivo por las limitaciones de lejanía, pero muchas otras, en realidad entorpece la verdadera comunicación.

Todos los días tenemos tanto qué hacer, que olvidamos empezar el día con lo más importante. Olvidamos hablar con Dios, solicitando su dirección, consejo, apoyo, fortaleza para afrontar todos los obstáculos que sin duda, se atravesarán arteramente en nuestro camino…el tráfico, un jefe autoritario, un maestro abusivo, amigos que nos mal aconsejan, problemas, problemas, problemas.

Este es un video que encontré, donde aplicando la tecnología, ejemplifica perfectamente la forma en la que Jesús ansía comunicarse con nosotros.

Para volver a la Cruz, debemos hablar con Dios y esperar en Él. Cuando creas que Jesús no te escucha, recuerda todas las promesas escritas en su Palabra: «Clama a mí y yo te responderé»; «Antes de que clamen, responderé yo; mientras aún hablan, yo habré oído»; «Guarda silencio ante Jehová y espera en Él»; «Todo lo que pidieres al Padre en mi nombre, creyéndolo, lo recibiréis».

Habla con Dios y encuentra a Jesús.

Leer más Un Chat con Dios

Dispuesto a asombrarnos

Recuerdo cuando era pequeño, cualquier cosa nueva que mis padres o amigos me enseñaran, se convertía en un asombro que se expresaba en los ojos, en la voz, en la manos y con un sorprendente ¡wow! Recuerdo cómo se volvía maravilloso ver un nuevo animal o ver que algo sucediera en la televisión, no existía […]

Leer más Dispuesto a asombrarnos

¿Qué puede ser tan valioso?

En estos días he comprobado cómo la mayoría de las personas nos aferramos a algo. Una persona enferma se aferra a la vida, a la esperanza. Una joven cuyo corazón ha sido roto se aferra al dolor, como si eso le diera sentido a su vida. Una madre se aferra a la soledad cuando las […]

Leer más ¿Qué puede ser tan valioso?

Dios, borra mi memoria.

Estos últimos días, en la lucha por volver a la Cruz, me he topado con una verdad innegable: nuestra memoria juega un papel muy importante cuando debemos tomar una decisión sobre Cristo. Durante toda nuestra vida guardamos recuerdos, ya sean buenos o malos, que son aquellos que nos dan un poco de guía acerca de […]

Leer más Dios, borra mi memoria.

Una súplica.

http://www.youtube.com/watch?v=iCK7ycGTMb4

En este camino de vuelta a la Cruz, me he dado cuenta cómo cambia nuestra perspectiva dependiendo de qué lado del camino estemos. Cuando estamos lejos, tratamos de evitar a todos aquellos que nos hablan de Jesús o que nos invitan a volver al camino de la Santidad. Cuando estamos en el camino de la Cruz, nuestro ánimo es para invitar a todo aquel que necesita a Cristo, ya sea alguien que fue nuestro amigo y se perdió o simplemente alguien que sabemos, necesita ayuda de lo Alto.

Y justo estoy en ese momento de transición, sin embargo, ahora estoy ávido de escuchar la voz de Dios en mi vida y seguir su dirección (aunque todavía me cueste mucho hacerlo). Mejor aún, mi corazón se descongeló en un instante y estoy ansioso por compartir lo que Dios está haciendo en mi corazón.

Algo que me entristece (y que seguramente entristeción a otros conmigo antes), es ver cómo muchos de mis compañeros de batalla, de esos amigos que no encontramos fácilmente, de esos fieles discipulos de Cristo se han esparcido, como dice su palabra: «como ovejas descarriadas…cada cual se apartó por su camino».

Me duele porque sé que nunca debimos apartarnos, porque ahora el peso del pecado nos asedia cada instante, nos hace creer que no somos suficientemente buenos para retomar el camino (y están en lo cierto). Porque no es que seamos buenos, es que a través de la Salvación y la aceptación del sacrificio de Jesús, somos limpios para su honra y su gloria.

A partir de ese momento, no es que seamos dignos, sino que hemos alcanzado la Misericordia de Dios.

Así que la súplica es esta: «Jesús, ayúdame a seguir tu camino, ayúdame a vencer todos los obstáculos de mi vida. Y por favor, Amigo de mi corazón, vuelve a llorar sobre ese Monte donde subiste a orar, donde derramaste tus lágrimas por nosotros ante el Padre. Tráenos de todos los rincones de la Tierra, sin importar qué hayamos hecho, que pensemos o aún si hemos dudado de ti.»

Para volver a la Cruz, debemos hacer nuestro el sacrificio maravilloso de Jesús en el Calvario. Que así sea.

Leer más Una súplica.